Tercer Grado, programa de opinión entre periodistas de la televisora más importante de México, ha concluido sus entrevistas a los candidatos a la Presidencia de México. Gabriel Quadri, candidato de Nueva Alianza (Panal), ha sido el último en visitar el programa.

A diferencia de las participaciones que tuvieron Josefina Vázquez Mota, Enrique Peña Nieto y Andrés Manuel López Obrador en este último programa especial los periodistas estuvieron igual de relajados que el candidato. Por parte del candidato no había algo que perder en las preferencias electorales y mucho que ganar al estar en el canal con mayor cobertura del país.

En el caso de los periodistas, no había nada que ganar y ningún interés por entrevistar al único candidato que no tiene posibilidades reales de ganar en la elección del primero de julio.

El programa se caracterizó por la soltura de todos los involucrados y no hubo agresiones por parte de los periodista al candidato. No fueron los macheteros que entrevistaron a Vázquez Mota; ni los periodistas responsables y respetuosos que preguntaron a Enrique Peña Nieto; tampoco, los generalizadores históricos del 2006 que entrevistaron a Andrés Manuel López Obrador. Todos se humanizaron por un momento.

Sí hubo un tema que fue recurrente durante todo el programa, pero tampoco fue algo desconocido que descubriera algún hilo negro en Quadri, solo fue recordar que Elba Esther Gordillo es la dirigente de la Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) que fundó el Partido Nueva Alianza. En otras palabras, Quadri es un títere de Gordillo.

Por supuesto, el candidato se pasó la noche negando que fuera un candidato manejado por Elba Esther Gordillo. Aunque, ahora todos los que vieron el programa saben que su hijo estudió Ciencias Políticas y será el asesor de la bancada de diputados del Panal. O sea, trabajará para la familia de “La Maestra”.

Quadri demostró en Tercer Grado que ser candidato a la Presidencia de México ha sido toda una aventura personal. Desde un inicio sabía que no tenía posibilidades reales de ganar la presidencia, pero sí el objetivo de lograr que el Panal mantuviera su registro. Hasta el momento ha hecho bien su trabajo y se ha divertido con la campaña política.

Es cierto, durante las últimas semanas Quadri ya no despierta el interés de antes, la novedad ha pasado y el candidato acepta el cansancio.

Faltan menos de 10 días para que la votación se haga y el interés por la política en esta semana ha bajado considerablemente. Solo el #Debate132 impidió que la monotonía se apoderara de las campañas.

Quadri será la anecdota que contribuya a contar historias de los usos y costumbres de la política mexicana a principios del Siglo XXI. Será la historia del intelectual “liberal” que permitió a un sindicato mantener el registro de su partido político.