Caminar Preguntando

La reforma al Código Federal de Instituciones y Procesos Electorales (Cofipe) en el año 2007 que afectó a los medios de comunicación en México, impidiendo a los particulares comprar publicidad que incidieran en las contiendas electorales del país y supuestamente “limitara” a los periodista a realizar su trabajo, sólo ha afectada la estrategia de campaña que se basa en las descalificaciones y los rumores que surgen desde el “cuarto de guerra” del candidato limitándo su campo de acción a la Internet. Al lado de la lucha por el voto, la reforma electoral del Cofipe sí ha provocado en los medios de comunicación mexicanos, críticos -casi en su totalidad- con la reforma, una actitud distinta a la mostrada en 2006: ahora buscan generar debates, ser más plurales, medir opiniones, tener a un ciudadano activo en sus programas y dar cabida a las encuestas más de lo que habían hecho en 11 años de alternancia.

Si la reforma al Cofipe ha sido dañina al proceso electoral para elegir presidente de México, lo sabremos al final de la contienda. Si la reforma al Cofipe ha provocado que los medios de comunicación, los comunicadores y periodistas sean más precavidos en sus comentarios, tampoco lo creo y veo. Sí ha provocado que los medios de comunicación consulten al IFE qué pueden hacer y qué no puede hacer; por otra parte, ellos mismos han buscado junto con el IFE tener claridad en qué se puede hacer.

Estemos de acuerdo o no con la reforma al Cofipe del 2007, en mi caso estoy en desacuerdo ya que considero que la opinión libre en su totalidad debe estar garantizada en una democracia, se debe señalar que ha provocado una nueva relación entre los medios de comunicación y los partidos políticos en el proceso electoral. Es muy pronto para hacer un balance general que explique cómo ha cambiado la relación entre los dos protagonistas de la reforma, pero ya hay visos:

1. Al tener una contienda que limita el dinero de los partidos políticos en los medios de comunicación en materia de spots, infomerciales y publireportajes, los candidatos se han acercado a los medios de comunicación para ser entrevistados. La entrevista en si mismo ya es un intercambio de ideas entre el político y el periodista. Es cierto que la entrevista busca la opinión del entrevistado, pero el entrevistador con sus preguntas y el desenvolvimiento del entrevistado puede obtener más información en profundidad que la publicidad de campaña. Por supuestos, el periodista puede provocar con sus preguntas el tropiezo de los políticos que permitan evaluar al ciudadano las capacidades políticas que tiene el candidato.
2. Los medios de comunicación a diferencia del 2006, se han acercado contundentemente a promover los debates como un mecanismo que permita al ciudadano obtener información de los políticos en campaña, conocer sus capacidades políticas, comparar propuestas y comportamiento ante la diferencia de opiniones. Los medios de comunicación ganan reating y una imagen positiva ante los votantes, pues el ciudadano reconoce fuentes primarias. El Cofipe y su reforma de 2007, han provocado que se genere una relación ganar – ganar en los medios de comunicación. No se debe dejar de lado que los medios de comunicación durante los años posteriores a la reforma han buscado con ahinco demostrar que la reforma es inoperativa en una democracia, por ello la tratan de llevar al extremo.
3. Llevar al extremo la ley, más la aparición de nuevos medios de comunicación a nivel nacional que incrementa la pluralidad de las voces y la percepción de la política en los ciudadanos mexicanos se han convertido en factores que combinados condujeron al periodismo y comunicadores en México ha buscar la participación del ciudadano en la contienda electoral en la agenda periodística. En efecto, los debates que proponen los medios de comunicación recuperan gran parte del modelo de “debate electoral” que se hace en los Estados Unidos, donde no solo los periodistas y especialistas preguntan a los candidatos, sino también los ciudadanos que están interesados en el proceso.

Con estas tres observaciones y manteniendo la sana distancia de la reforma de 2007 al Cofipe se puede señalar que el escenario que provocó más otras cuestiones políticas que han surgido del malestar ciudadano, los medios de comunicación han tenido que recurrir a un rol distinto en la campaña electoral actual.

Así la empresa internacional, con sede en Estados Unidos, CNN ha convocado, por medio de su filial en México (CNN México) a los cuatro candidatos al programa “México Opina” ha tener un diálogo con el conductor, el cual realizará preguntas al candidato que tendrán su procedencia del público. La propuesta de CNN puede ser la más conservadora, ya que los candidatos no debaten al mismo tiempo, pero contará con la participación de los ciudadanos. La primera entrevistada será Josefina Vázquez Mota el 22 de abril.

La periodista Carmen Aristegui con MVS y el canal 52 también han convocado a un debate en su programa de radio matutino y que se puede ver por medio de “Dish” (televisión satelital). El formato permite que los candidatos debatan entre ellos y la periodista sea la moderadora del mismo y la temática girará entorno a la iniciativa promovida por un grupo de intelectuales y académicos desde el 27 de marzo. Queda entendido que el ciudadano no preguntará, ni participará activamente, pero sí hay participación de especialistas, por medio de las preguntas que han formulado con anterioridad. Hasta este momento Quadri, AMLO y Vázquez Mota -con reservas han aceptado-.

Grupo Milenio también ha convocado aun debate a los cuatro candidatos. El formato de Milenio es el más participativo para la ciudadanía. Contempla un formato de debate al estilo estadounidense, los cuatro candidatos estarán juntos, habrá un moderador que solo hará las preguntas que los ciudadanos interesados en la campaña electoral envíen. Quadri, AMLO y Vázquez Mota han aceptado. Para este debate no hay fecha.

Se debe celebrar que el número de debates se incrementen, más cuando proponen la participación de diversos grupos de la ciudadanía, desde especialistas hasta ciudadanos de a pie. ¿Qué se puede criticar de estas primeras propuestas? Hasta el momento no se conoce el grado de transparencia que existirá en la selección de preguntas que hará Milenio y CNN. En el caso de Aristegui el debate girará entorno a las preguntas de un grupo de intelectuales. En materia de participación ciudadana el debate de Aristegui es el más pobre, pero el más rico en materia de especialistas.

Entre más debates existan entre candidatos, tenemos posibilidades reales de conocer a los candidatos al a Presidencia de la República, saber sobre sus conocimiento reales de la situación del país, sus capacidades políticas y su concepción de la política. Los debates dejan desnudos a los político ante los ciudadanos. Algo bueno se ha sacado de la reforma electoral de 2007 al Cofipe, no los debates sino el cambio de actitud de los medios de comunicación y la transformación de una relación que debe seguir creciendo en términos democráticos.

Por supuesto, no podría terminar este día de hoy sin mencionar que las televisoras que transmiten de manera pública en México, TvAzteca y Televisa, no han convocado a debatir en sus pantallas a los cuatro candidatos.